miércoles, 25 de junio de 2008

Adivinar. Preguntar. Pedir...

Una de las cosas que predico en mis cursos y a mis pacientes es que el único modo de saber cómo está el otro es preguntándoselo. Pero... y si nadie nos pregunta cómo estamos y necesitamos ayuda, apoyo, o simplemente sentir que alguien nos hace caso??

Hace años me frustraba y cabreaba con la gente de mi alrededor cuando yo me encontraba bien y veía q nadie me hacía caso, que nadie me preguntaba y parecía que a nadie le importaba... Con el tiempo he aprendido a que cuando necesito algo, lo pido, lo expreso, lo digo, aunq luego caiga en saco roto...

Pero aún después de haber aprendido la lección, cuando realmente estoy mal y abatida no lo suelo expresar, hasta q el vaso está completamente lleno y empieza a desbordarse; es entonces cuando pido un salvavidas...

Hoy, después de semanas sintiendo q el vaso se llenaba, he pedido ayuda o he expresado mis carencias de atención explícitamente. Mi miedo es que como decía antes, caigan en saco roto... en todo caso, sé que yo me habré expresado y habré pedido ayuda. Si no la encuentro, supondré q la pedí a la gente incorrecta...

No hay comentarios: